Dimetrodon
Dimetrodon
Texas, Oklahoma y Alemania

Dieta: Carnívora
Peso: 25 a 250 kilogramos
Periodo: Pérmico
Encontrado En: Texas, Oklahoma y Alemania
El Dimetrodon fue un animal prehistórico que estuvo presente en nuestro planeta durante lo que conocemos como Paleozoico, y dentro de esta clasificación, concretamente en el periodo pérmico (hace unos 290 millones de años aproximadamente). Se le ha clasificado dentro del grupo de los sinápsidos pelicosaurios.
Este género como hemos visto, habría habitado en el Pérmico, incluso antes de que existiesen los dinosaurios. Lo más peculiar de su aspecto sin duda era la cresta en forma de vela que tenía sobre su espalda. Puedes observarlo en la imagen que verás un poco más abajo.
El Dimetrodon era un animal bastante furioso, voraz y sorprendente. De hecho, la BBC le ha dedicado un documental casi en exclusividad sólo para él. Y es que este animal prehistórico es una pieza muy importante en la historia de la evolución. (Carnívoro del Pérmico)
La familia: sinápsido pelicosaurio
Una pequeña lección sobre el origen de los dinosaurios
Los primeros reptiles que aparecieron en la Tierra fueron una evolución de los primeros anfibios. Ten en cuenta que acabamos de resumir varios cientos de millones de años en un frase, pero no nos queremos alargar en este punto ya que los que nos interesan son los sinápsidos (familia del Dimetrodon).
Esos primeros reptiles son muy importantes en el proceso de la evolución. El motivo tiene forma de huevo y es que estos seres fueron los primeros preparados para poder reproducirse fuera del agua. Y todo, gracias al huevo amniótico.
Los embriones, para desarrollarse, necesitaban estar en un ambiente de agua; pero como hemos dicho, estos reptiles ya vivían fuera de ella. Los huevos tenía dentro varias membranas que permitían reproducir las condiciones de humedad que necesitaba el embrión para poder crecer.
A estos seres se les llamó amniotas. Ojo, estamos hablando de los tatarabuelos del Dimetrodon.
Los amniotas pudieron reproducirse con mucha rapidez gracias a ese huevo especial, lo que provocó también su evolución en varios grupos.
Estos grupos se clasificaron en dos grandes líneas que luego fueron derivando en otras. Con el esquema te va a quedar más claro.
Historia del descubrimiento
Saurópsidos (reptiles) | Sinápsidos (synápsida) | ||
Anápsidos | Diápsidos | Reptiles mamiferoides | Mamíferos |
Los diápsidos en arcosaurios, lepidosaurios, ictiosaurios y sauropterigios. De la rama de los arcosaurios fue de la que derivaron los dinosaurios.
¿Entonces estos seres son anteriores a los dinosaurios?«
Exacto.
De hecho, no son para nada cercanos en el tiempo. Los amniotas aparecieron en la era Paleozoica, período Carbonífero: hace más de 360 millones de años. Para hablar de dinosaurios ya tenemos que cambiar de era y saltar a la siguiente, a la Mesozoica en la etapa Jurásica. Hay unos 100 millones de años de diferencia entre ambos.
Como puedes ver en el esquema, de los amniotas vienen los sinápsidos (la familia del Dimetrodon).
¿Qué tienen de característico estos seres?
Con la llegada de los sinápsidos se da un paso importante en el proceso de evolución ya que aparecen los primeros mamíferos que pisan la faz de la tierra: los Pelicosaurios (sí, el segundo apellido del Dimetrodon).
Sin embargo, hay que tener en cuenta que ninguno de los mamíferos de aquella época consiguió evolucionar: los mamíferos actuales provienen de otra línea.
La principal característica de estos seres es el «abanico» que recorre su espalda. De hecho, se les suele conocer como los «dinosaurios de la vela» o «dinosaurios de la aleta«. No obstante, más adelante hablaremos en profundidad de esa «cresta».
Pero fíjate en un dato, ya vimos antes que los amniotas aparecieron bastante antes que los dinosaurios. Los sinápsidos también, aunque algo menos. Esta rama de los amniotas habitaron la tierra en el período Pérmico (era Paleozoica) hace unos 280 millones de años.
¿Era el Dimetrodon un dinosaurio o no?
No, el Dimetrodon no era un dinosaurio.
De hecho, si te vuelves a fijar en el esquema de antes verás que los dinosaurios vienen de la rama de los Saurópsidos, no de los sinápsidos. Por tanto, aunque de forma habitual se ha considerado al Dimetrodon el dinosaurio de la vela, no es así. Nuestro amigo no era un dinosaurio.
Taxonomía
REINO Animalia
FILO Chordata
CLASE Sinápsida (si hubiese sido un dinosaurio, aquí aparecería Archosauria)
ORDEN Pelicosauria
SUBORDEN Eupelycosauria
Sin rango: Sphenacodontia
FAMILIA Sphenacodontidae
GÉNERO Dimetrodon
Especies de Dimetrodon: un sinápsido de familia numerosa
Hay que reconocerle a este ser prehistórico que ha tenido abundante descendencia. Desde 1978, se han catalogado a unas 20 especies de este sinápsido.
Sin embargo, con el paso del tiempo se ha visto que muchos no dejaban de ser sinónimos*.
* Se usa el término sinónimo para mencionar cuando se ha catalogado a una especie como distinta, cuando en realidad es igual que otra.
Vamos a ver las que sí son especies distintas:
- Dimetrodon limbatus: el primero siempre es importante. Y es que de esta especie era el primer fósil que fue encontrado. Aunque de aquella, en 1877, Edward Drinker Cope lo bautizó como Clepsydrops limbatus. Estos restos se renombraron como D. limbatus en 1940 por Alfred Romer y Llewellyn Ivor Price.
- Dimetrodon milleri: precisamente, fue Romer el que descubrió esta otra especie, la milleri. En este caso, es singular ya que se trata de la especie más pequeña en tamaño. También, su vela es redonda al completo (como dibujando un semicírculo). El resto de ejemplares presentaban ondulaciones en su vela.
- Dimetrodon angelensis: su nombre deriva de que sus fósiles fueron encontrados en la Formación de San Ángelo en Texas.
- Dimetrodon booneorum: descubierto también por Alfred Romer.
- Dimetrodon dollovianus: al igual que son su hermano el D. limbatus, Cope nombró a este ejemplar como «Embolophorus dollovianus«. Sería en 1903 cuando Ermine Cowles Case lo reasignaría como Dimetrodon.
- Dimetrodon giganhomogenes: esta especie también fue clasificada por E.C. Case.
- Dimetrodon grandis: en este caso, Alfred Romer y Llewellyn Ivor Price volverían a determinar una clasificación que en un origen fijó E.C. Case. Lo había denominado Theropleura grandis.
- Dimetrodon loomisi: fue también clasificado por Alfred Romer.
- Dimetrodon macrospondylus: al igual que en otros ejemplares, Cope lo denominó Clepsydrops macrospondylus. En 1907, Case lo volvió a renombrar.
- Dimetrodon natalis: junto al D. milleri fue la especie más pequeña. La más grande era el D. limbatus.
- Dimetrodon occidentalis: su característica más especial es que no procede de Texas u Oklahoma como el resto. Estos fósiles fueron encontrados en Nuevo México.
- Dimetrodon teutonis: esta especie fue descubierta hace muy poco siendo además un hallazgo muy especial. Es el único ejemplar encontrado fuera de América del Norte (en Alemania).
¿Qué significa su nombre?
Su nombre, de forma literal, significa «diente de dos medidas«. El motivo es que este sinápsido tenía dos dientes caninos que sobresalían por longitud de todos los demás. Siempre que veo una imagen de los dientes del Dimetrodon me acuerdo de los dientes de un vampiro.
¿Quién descubrió a este sinápsido?
En 1875, el paleontólogo Edward Drinker Cope hallaba los primeros restos del Dimetrodon, aunque como vimos antes les asignó otro nombre. Fue descubierto en los Lechos Rojos de Texas.
No obstante, habría que esperar muchos años más, en concreto hasta 1978, para que el mismo Cope descubriese la característica más llamativa de este sinápsido: la vela. En los restos anteriores nunca se habían encontrado fósiles de esta parte. De aquella, el paleontólogo asimiló que más que una vela, era una aleta para poder moverse más rápido por el mar.
Dónde y cuándo vivió el Dimetrodon
Todos los restos de este sinápsido fueron encontrados en América del norte, siendo Texas y Oklahoma los lugares donde mayor concentración de fósiles se han hallado. Sin embargo, es curioso el ver que hace unos cuantos años se hallase en Alemania un ejemplar.
La explicación a este fenómeno se debe a la propia historia de la tierra.
En la era Paleozoica, justo en el período Carbonífero, se formaba la Pangea (la unión de todos los contenidos) habiendo un único mar, el Panthalassa.
Por tanto, todo era una única masa de tierra, dando así la opción al Dimetrodon de que se moviese y se pudiese asentar en otros lugares.

Dónde y cuándo vivió el Dimetrodon
Este sinápsido es conocido como el «dinosaurio con cresta» aunque ya sabemos que es un
ser amniota y no un dinosaurio. Vamos a ver cómo era este Dimetrodon:
Ficha Técnica |
Nombre | Dimetrodon |
Longitud | Entre 1,5 y los 3,2 metros de media aprox. |
Altura | Media 1 metro hasta la cadera |
Peso | Entre 25 y 250 kilos |
Dieta | Herbívoro |
Período | Era paleozoica, período carbonífero (pérmico inferior) |
Años | Hace unos 280millones de años |
Encontrado en | Texas, Oklahoma y Alemania |
El Dimetrodon era un cuadrúpedo cuyo mayor característica es la vela que tenía en su espalda. Es como si tuviese un enorme abanico incrustado en la espalda.
Cuánto medía el Dimetrodon
No era un animal de una envergadura tan grande como muchos de los dinosaurios que hemos visto. Date cuenta que el mayor Dimetrodon que se ha encontrado (de la especie Grandis) medía más de 3 metros de longitud. En cambio, el más pequeño (un teutonis) apenas pasaba del medio metro.

Dentro de lo que es su cuerpo, destaca el cráneo. Era grande, curvo y con forma triangulada (se estrechaba en la parte del hocico). Su mandíbula era fuerte y poderosa, esto ya indica, aunque lo veremos más adelante, que se alimentaba de animales grandes. De hecho, está considerado uno de los superdepredadores de su época.
La forma de la boca del Dimetrodon dibuja una oscilación ascendente. Por eso, cuando tenía su boca cerrada (difícil teniendo en cuenta que le encantaba comer) parecía que estaba sonriendo. Aunque por mucha sonrisa que te ponga, si te lo encuentras lo mejor es que salgas corriendo.
Los dientes del Dimetrodon: menudo mordisco
Aunque la vela es lo más espectacular de este sinápsido, sus dientes no lo son para menos. Ya vimos que su nombre deriva de sus dos caninos espectaculares. Estos dos dientes sobresalían muchísimo en tamaño en comparación con los otros.
Recuerda un poco a un Dientes de Sable (Diego, en las películas de Ice Age).
Por si no fuera suficiente con estos dos incisivos del Dimetrodon, el resto de dientes estaban rematados con una forma aserrada. Así, podían desgarrar mejor la carne y hacer más daño a sus adversarios.
La cola que creció con el tiempo
Cuando fue descubierto este sinápsido, se pensaba que su cola era muy pequeña. El motivo era que no se había encontrado un esqueleto que mostrase la cola entera. Tendrían que pasar bastantes años hasta que apareció un fósil con todos los huesos de la cola.
Desde ese día, ya se sabe que la cola del Dimetrodon estaba formada por unas 50 vértebras que iban haciéndose más pequeñas a medida que llegaban al final de la cola.
El abanico, cresta, aleta o vela del Dimetrodon
Sí, acabamos de llegar a la parte más característica de este sinápsido, por eso le vamos a dedicar un apartado completo.
Como hemos dicho esta cresta o aleta le recorre toda la espalda. Empieza en el cuello y llega hasta el arranque de la cola. Se cree que la forma de la aleta podía ser una muestra de dimorfismo sexual (diferencias corporales entre el macho y la hembra). La hembra tendría una vela más pequeña, mientras que la del macho era más grande.
Las espinas que forman la cresta salían de la columna vertebral siendo las más largas las de la parte central de la espalda (podían llegar a medir un metro de altura).
¿Para qué usaba la vela el Dimetrodon?
Función termorreguladora
Uno de los grandes debates paleontológicos se centra en si los dinosaurios tenían sangre caliente o fría. Podríamos decir sin miedo a confundirnos que pasa algo parecido en relación a la función de la cresta en lo que se refiere a dar temperatura corporal.
Hay multitud de estudios en relación a cómo y cuánto tardaba la cresta en proporcionar calor al Dimetrodon. Los científicos (entre ellos, destaca Stephen C. Haack) afirman que es posible que este sinápsido pusiese su vela a «tomar el sol«.
Se podría decir que le atribuían a la aleta el funcionamiento de una batería. El Dimetrodon ponía al sol la cresta para que guardase todo el calor posible, así conseguía que luego se lo fuese proporcionando poco a poco.
Pero como te decía antes, no ha habido conformidad en este tema. Para otros paleontólogos, la aleta lo que hacía era eliminar los posibles excesos de calor que sufría el Dimetrodon al tomar el sol por la mañana para calentarse. Incluso, se cree que por la noche podía cortar el flujo de sangre hacia la aleta y así mantener mejor el calor.
Con el tiempo han ido creciendo más las voces que aseguran que la vela no podía cumplir una función termorreguladora. Su argumentación se basa en que las especies más pequeñas de Dimetrodon también tenían cresta.
Los Dimetrodon más pequeños, solo con el calor del sol podían mantenerse calientes; por tanto, la cresta debía cumplir otra función.
Selección sexual
Ya dijimos que el tamaño de la cresta podía indicar el género del Dimetrodon; sin embargo, también se especula si podía ser un reclamo sexual. Un tamaño mayor de la vela podía ser más llamativo para la hembra a la hora de escoger con quién aparearse.
De hecho, se cree que cuanto más grande o exagerada fuese la cresta más llamaba la atención de la hembra. Por ello, la evolución de esta especie se dirigió a desarrollar unas velas más grandes de cada vez.
Otras funciones
Hipótesis acerca de para qué servía la aleta ha habido muchas. Te contamos de forma breve algunas:
- Una teoría apuntaba que podía haber servido para camuflarse mejor entre los juncos y así, acechar a sus presas.
- Otra proposición indicaba que de verdad era una aleta y que servía para que el Dimetrodon pudiese nadar de forma ágil.
- La vela también podía servir para estabilizar al animal en sus movimientos.
- Función intimidatoria: la cresta podía hacer pensar a sus enemigos que el Dimetrodon era más grande de lo que en verdad era. Así podría disuadirles de atacarle.
¿Hasta dónde llegaba la vela?
No nos referimos a cuánto podía llegar a medir de alto, como mencionamos antes las espinas más largas tenían cerca de un metro de longitud.
Podríamos decir que la vela de los Dimetrodon estaba compuesta por dos elementos: las espinas y la tela o piel dura que la cubría. Para que me entiendas mejor, solo hace falta que te imagines la propia vela de un barco. La tela está sustentada por los mástiles que son los que hacen que se extienda.
Aquí igual.
Hace unos años (en el 2012) se publicaba un estudio que hizo pensar que la vela no cubría por completo las espinas, y que por tanto, las espinas se verían sueltas. Casi como si fuesen unos pinchos.
Aunque esa visión del Dimetrodon se ha comentado bastante, la realidad es que se malinterpretó el estudio. Esa investigación se basaba en los fósiles de un espécimen que había sufrido varias fracturas en las espinas. Esas fracturas hacían que la cresta no llegase hasta las puntas de las espinas; por eso, se malentendió que las espinas iban al descubierto.

Comportamiento de este sinápsido
Una de las cuestiones más peculiares que se dice del Dimetrodon es que le iba más la vida nocturna que la diurna. Esta afirmación proviene de un estudio publicado en el 2014 en «Proceedings of the Royal Society» (Actas Biológicas de la Royal Society).
Este estudio explica que los ojos de los sinápsidos (en concreto, entre otros ejemplares, cita a la especie Dimetrodon milleri) tenían unas características especiales por su diámetro y los anillos escleróticos. Todo parece indicar que vivían más de noche que de día.
De hecho, este estudio explica que la vida de los sinápsidos vegetarianos era más diurna, mientras que la de los carnívoros era nocturna. Este aspecto de la vida del Dimetrodon contribuiría a reafirmar que la vela no tenía una función termorreguladora. ¿De qué le iba a servir de noche?
Qué comían los Dimetrodon
El Dimetrodon era carnívoro, y como vimos, era un superdepredador. Por lo que podemos decir que era muy carnívoro.
Además, sus enormes dientes incisivos y su poderosa mandíbula indican que podía cazar animales de su misma envergadura. Posiblemente, a otros pelicosaurios.
Dimetrodon vs Edaphosaurus
Ambos sinápsidos son muy parecidos, casi iguales. Solo tienen dos diferencias, aunque una de ellas es fundamental. El Edaphosaurus era herbívoro (sus dientes eran romos, no servían para desgarrar); en cambio, al Dimetrodon le gustaba la carne, como por ejemplo, la del Edaphosaurus.
Estos sinápsidos herbívoros son uno de los platos preferidos de los Dimetrodon.
La otra diferencia tiene que ver con la forma de la vela. La del Edaphosaurus era más arqueada.
